El termino femicidio fue acuñado por la teórica feminista Diana Russell para visibilizar “el asesinato de mujeres realizado por hombres motivado por odio, desprecio, placer o un sentido de propiedad de las mujeres”. En las últimas décadas se ha demostrado que este tipo de crímenes son cometidos principalmente por las parejas íntimas o familiares de las víctimas; sin embargo, aunque ha sido desatendido, los femicidios también son cometidos durante la violación, la tortura y la esclavitud en el contexto de la prostitución y la pornografía, lo cual fue denunciado desde la década de los ‘90 por Diana Russell y Jane Caputi.

En el caso de Argentina según los Informes del Registro Nacional de Femicidios de la Justicia Argentina entre los años 2017 a 2019, la cifra de mujeres en situación de prostitución victimas de femicidio alcanza el 3,6%, pero por lo general existe un sub registro de estos crímenes pues en oportunidades los casos no son reconocidos como femicidios por las autoridades, las investigaciones se cierran rápidamente, aunado a que las victimas suelen ser revictimizadas, es decir, la sociedad las responsabiliza de sus propias muertes.

Ante este fenómeno han comenzado a proliferar narrativas provenientes de las organizaciones y sindicatos de mujeres prostituidas, en las cuales si bien se denuncia con frecuencia la ocurrencia de los femicidios de las mujeres en situación de prostitución, estas suelen tener entre sus intenciones mostrarlos como una consecuencia de la ausencia de regulación de la prostitución por parte del Estado, con el fin de presionar su legalización. Sin embargo, invisibilizan la violencia estructural y sistémica presente en la prostitución, la relación entre esta forma de explotación sexual y la victimación de las mujeres, la participación de los proxenetas, tratantes y el sistema prostibulario en estos crímenes; pero sobre todo, como la prostitución al ser una forma de dominación y violencia sexista supone un factor de riesgo para las mujeres con independencia de las condiciones y escenarios en la que se realice.

Por este motivo, desde el Programa de Estudio, Formación e Investigación sobre Trata y Explotación (PEFITE) de la Secretaría Académica de La Universidad Nacional de San Martín (UNSAM), dirigido por Alika Kinan – la primera sobreviviente del delito de trata con fines de explotación sexual que impulsó y ganó un juicio contra sus proxenetas y el Estado-, nos hemos comprometido con la investigación en la materia iniciando con el proyecto de investigación El femicidio de mujeres víctimas de trata y explotación sexual en Argentina durante el periodo 2015-2020.

Este trabajo es uno de varios proyectos que conforman la cartera de investigación que viene desarrollando el PEFITE bajo la dirección de la Doctora Esther Pineda, investigadora en materia de femicidios y autora del libro Cultura Femicida; y que contará con un equipo multidisciplinario de profesionales, estudiantes universitarias y jóvenes activistas comprometidas con la lucha contra la trata y la explotación sexual, entre las que destacan Candela Fernández Casabat, Lucia Rennella, María Flores, Sofia Becce, Sol Tobía y Victoria Pinillo.

En este sentido la investigación que inicia este mes de octubre se propone visibilizar la explotación sexual como una forma de violencia sexista que profundiza el riesgo de las mujeres de ser víctima de femicidio, caracterizar y analizar los femicidios de mujeres víctimas de trata y explotación sexual que han tenido lugar en Argentina durante los últimos 5 años, como también ahondar en el tratamiento dado a los casos por parte de los medios de comunicación y del Estado.

Investigación que tiene como propósito aportar en la concientización de la problemática y el involucramiento de diversos actores y organizaciones sociales, como también generar productos académicos de calidad y rigurosidad metodológica para proporcionar insumos al Estado argentino, sus decisores y legisladores para el diseño e implementación de propuestas legislativas, políticas públicas e iniciativas para la erradicación de los femicidios de mujeres víctimas de trata y explotación sexual.

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