Por Gaspar Grieco. Fotos: Pablo Carrera Oser

De a poco el Campus Miguelete vuelve a tener estudiantes. La presencialidad ya es un hecho para las materias prácticas y es habitual ver a estudiantes y docentes chocando sus puños en los pasillos y los caminos rodeados de césped. Entre ellos, un grupo de cinco chicas recorre las esculturas de la UNSAM mientras toman medidas, observan, sacan fotos, toman notas y conversan. Son estudiantes de la Licenciatura en Conservación y Restauración del Patrimonio Cultural de la Escuela de Arte y Patrimonio.

La UNSAM exhibe 12 esculturas alrededor del Campus. La propuesta surgió en 2010 por iniciativa del entonces rector Carlos Ruta y desde entonces una a una se fueron instalando las obras de reconocidxs artistas argentinxs de la talla de León Ferrari, Enio Iommi, Jorge Gamarra, Pablo Reinoso y Nadia Guthmann, entre otrxs.

Acompañadas por sus docentes, las estudiantes de la materia Restauración de Esculturas realizan un diagnóstico del estado de conservación de todas las obras de la UNSAM al aire libre. “Estamos haciendo un relevamiento observando la materialidad y el nivel de deterioro que pueden presentar para ver si hay posibles agentes que puedan deteriorar la escultura”, dice Margarita.

Judith Fothy, restauradora y profesora titular de la cátedra explica que “si el Campus tiene obras tan bellas expuestas es importante mantenerlas en buen estado de conservación” y amplía: “En principio estamos haciendo fichas técnicas, estudiando cuáles son los factores de deterioro que más alteran a cada obra y estamos haciendo un registro y una documentación exhaustiva en conjunto con la gente de Infraestructura de la UNSAM”.

Las esculturas, emplazadas en diversos puntos estratégicos del Campus Miguelete, fueron fabricadas con acero inoxidable, hormigón negro, madera, granito, hierro, mosaico veneciano y mármol, entre otros materiales.

Alejandra Rubinich es docente de la Escuela de Arte y Patrimonio y restauradora especialista en materiales inorgánicos, como piedra, simil piedra y metal. “La mayoría de estas obras están en buen estado de conservación y no tienen muchos años como para ver deterioros muy grandes. Hay casos particulares donde sí necesitan intervención y en otros necesitan un trabajo de conservación preventiva”, cuenta.

Por su parte, Sergio Medrano, docente y especialista en madera señala que la escultura Percanta II de León Ferrari “está bastante deteriorada y en el momento en que se pueda se va a sugerir una propuesta” y explica los pasos a seguir para llevar adelante una intervención en una escultura: “Los chicos están haciendo un relevamiento fotográfico, el armado de una ficha técnica de cada obra y en base a eso relevan datos del artista, los datos de la obra, de la historia de la obra, del sistema constructivo, del emplazamiento.. Luego, con todos esos datos se elabora una propuesta de tratamiento”.

Para los docentes y estudiantes de la Licenciatura en Conservación y Restauración del Patrimonio Cultural recorrer el Campus y cursar sus materias prácticas en la Universidad es toda una novedad, dado que hasta este año la carrera se cursaba completa en el Taller TAREA en el barrio porteño de Barracas. “Para nosotros es una gran alegría, porque podemos interactuar más con esculturas en exterior y abrir el campo de trabajo, porque pasamos de trabajar en un taller pequeño a un espacio enorme”, concluye Alejandra Rubinich.

Una galería de arte permanente en la UNSAM