Por Gaspar Grieco | Fotos: Pablo Carrera Oser

Ante un auditorio colmado por estudiantes y profesores, y con la presencia del rector Carlos Ruta y autoridades de la UNSAM y el Instituto Goethe, el filósofo y divulgador Richard David Precht disertó en el Campus Miguelete sobre los efectos sociales de la digitalización en los mundos del trabajo y la educación. “Las revoluciones técnicas son las que alteran la historia porque provocan cambios económicos y son absolutamente irreversibles. Estamos viviendo la cuarta revolución industrial”, afirmó.

El autor de Conozca el mundo: Historia de la filosofía (2015) analizó las transformaciones sociales ocurridas luego de los principales avances técnicos de la historia y enumeró los cambios que provocaron las revoluciones industriales. En esa línea, distinguió cuatro momentos: “La primera revolución industrial europea y la máquina de vapor, que provocaron que los países agropecuarios se convirtieran en industriales; la producción serial del modelo fordista, que culminó con la Primera Guerra Mundial y planteó una superación de la modernidad; una tercera revolución tecnológica, introducida por la computadora y los autómatas en la vida cotidiana; y una cuarta revolución actual, dada por la digitalización”.

Sobre esta última, que conllevaría a un cambio total de la economía, Precht sostuvo: “El sentido de la digitalización consiste en el reemplazo del trabajo humano. Las máquinas trabajarán entre ellas ocasionando que, en los procesos complejos, ya no se necesiten personas. Tenemos que plantearnos cómo será el trabajo en el futuro si finalmente todo termina siendo reemplazado por las máquinas”.

Asimismo, Precht indicó que “los modernistas de la economía” explican estos cambios de forma positiva “con el argumento de que los avances técnicos generarán más puestos de trabajo”. Sin embargo, el filósofo se mostró escéptico: “Las tres revoluciones industriales potenciaron la ampliación de los mercados, es decir, generaron globalización. La cuarta revolución industrial no ampliará los mercados, pero hará que los ya existentes sean más eficientes”.

Por último, el especialista analizó el modo en que los desarrollos y la técnica —con el paradigma de Sillicon Valey a la cabeza— afectan las relaciones interpersonales. “Estamos en un mundo donde las cifras y los cálculos hacen que toda la magia se pierda”, afirmó.

El encuentro, organizado por la UNSAM y el Instituto Goethe, concluyó con un diálogo público entre el filósofo alemán y la secretaria académica de la Escuela de Humanidades, Ana María Vara.