Por Gaspar Grieco | Fotos: Pablo Carrera Oser

“Este Honoris Causa es el modesto reconocimiento de esta joven universidad, que cumple 25 años, a una vida dedicada a la literatura”, expresó el rector Carlos Ruta en el inicio de la ceremonia. Luego, y tras definir la Universidad como una “experiencia de transformación” que “cambia la vida de muchos jóvenes”, Ruta destacó que “la literatura es esencial para la vida universitaria” y agradeció a Alessandro Baricco por su obra y su legado: “La literatura es una provocación a hacer nuevas experiencias para intentar comprender el mundo. Gracias Alessandro por hacer, con tus textos, que nos encontremos en la esperanza y en la verdad”.

Luego, Laura Malosetti Costa brindó la tradicional laudatio, en la que propuso un recorrido por la obra del escritor italiano y destacó su importancia para la literatura contemporánea. “Desde su primera novela, Castelli di rabbia, de 1991, hasta La Sposa giovane, de 2015, se puede seguir el hilo de una constante indagación en las ruinas del siglo XIX. Muchas personas conocen a Baricco solo por Seda (1996), una novela de amor y de viajes. Pero hay en ella más cosas, que aparecen como una constante en otros de sus libros: el fracaso, la derrota, la guerra, la belleza de la caída, la dignidad sublime del derrotado”.

Para concluir, Malosetti Costa destacó que Baricco tiene “un modo de plantarse frente al saber y el placer que tiende a borrar las fronteras: un modo desprejuiciado y sin solemnidad, una cierta melancolía, una fina sensibilidad cristalizada”.

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Un viaje de Macedonia a la UNSAM junto con Alessandro Baricco

Luego de recibir el título de doctor Honoris Causa, Baricco agradeció a todos los presentes: “Esta universidad es un lugar fantástico para ser homenajeado y la voy a recordar toda mi vida”.

En su exposición “Alejandro Magno. Sobre la narración”, Baricco rememoró los viajes del célebre Alejandro III de Macedonia (Alejandro Magno) por el extenso territorio persa en el año 334 a. C. y destacó el valor de la narrativa (storytelling) para entender la realidad: “La realidad está compuesta por hechos y por el relato de esos hechos. Para Alejandro, la realidad era una sola y estaba compuesta por hechos y por storytelling”.

Según el escritor italiano, esta idea de ver el mundo fue un “obsequio” que Alejandro Magno le entregó a la humanidad: gracias a la importancia de “reconocerse y que lo reconocieran como el nuevo Aquiles”, se embarcó a la conquista de la gran civilización persa. “Alejandro era un megalómano loco, pero no hubiera viajado de no saber que ese viaje solo sería un fragmento de la historia. Uno muere verdaderamente cuando no tiene una historia en la cual sobrevivir”, expresó.

Por último, Baricco señaló que Alejandro Magno viajó 20.000 kilómetros por el territorio persa “para buscar su propia identidad” y sostuvo que, para entender el porqué de su viaje, es necesario imaginar el mundo como él lo pensaba: “Hizo ese viaje porque quería conocer el fin del mundo, esa era su narrativa, su storytelling. Todos buscamos saber dónde termina nuestro mundo, pero es difícil entendernos a nosotros mismos y nuestra relación con los otros. Eso es una narrativa, nuestro storytelling”.

Al concluir, el director del programa Lectura Mundi, Mario Greco, le entregó a Baricco un aguayo de hilo del norte argentino.

El evento contó con un espectáculo circense a cargo de la Compañía de Teatro Acrobático de laUNSAM, dirigida por Gerardo Hochman.