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Liliana Arrachea, especialista en física de la materia condensada y directora adjunta del ICAS, es la primera investigadora de la UNSAM distinguida con el Premio de Investigación Georg Forster.
Por Alejandro Zamponi | Foto: Pablo Carrera Oser
Todos los años, la Fundación Alexander von Humboldt otorga seis Premios de Investigación Georg Forster en reconocimiento a la trayectoria de investigadores excepcionalmente calificados que provienen de países en desarrollo y que están en actividad. En respaldo a los descubrimientos, teorías o enfoques innovadores, el premio otorga 60.000 dólares, además de 25.000 euros adicionales destinados a financiar proyectos colaborativos con investigadores alemanes.
“Lo más gratificante de recibir un premio de este tipo es el reconocimiento a todo el esfuerzo que uno pone. Y si bien es un esfuerzo relativo (porque disfruto muchísimo de mi trabajo), la verdad es que invierto mucha dedicación. Saber que eso tiene un impacto positivo es algo gratificante que te da energías para seguir en ese camino”, asegura la especialista en física de la materia condensada Liliana Arrachea, quien a continuación habla sobre su especialidad, enmarca el significado del premio recibido y destaca la importancia del International Center for Advanced Studies (ICAS) de la UNSAM en el sistema científico nacional.
¿En qué consiste su campo de investigación?
La física de la materia condensada se refiere, de manera general, a la física del estado sólido, a las propiedades de los materiales y a la investigación de nuevos materiales. En mi caso, me dedico a la teoría. La materia condensada es el equivalente de lo que la sociología representa para las ciencias sociales: vendríamos a hacer sociología de las partículas (átomos, núcleos y electrones). Los materiales condensados son duros porque los iones forman una red que genera rigidez. Además de eso, los materiales que son buenos conductores de la electricidad tienen un montón de electrones que se mueven dentro de ellos. Las propiedades de esos electrones dentro del material son completamente distintas de cuando están aislados en otras estructuras. Me interesan, en particular, las propiedades que mejoran la conducción eléctrica y estoy estudiando precisamente cómo se produce el transporte eléctrico y de energía en la escala de los nanómetros.
¿Cuáles son las herramientas que utilizan para desarrollar estas investigaciones?
La materia condensada se apoya en dos ramas: una es la mecánica cuántica; la otra, la física estadística. Se trata de física estadística cuántica aplicada a problemas concretos. Existe mucho interés por generar distintos mecanismos para conducir la electricidad, entender cómo se disipa el calor y cómo puede transportarse la energía y la información. También buscamos entender propiedades de nuevos materiales, por qué un material es superconductor… Se trata de un área muy creativa, todo el tiempo se están descubriendo nuevos materiales cuyas propiedades no se entienden del todo bien. Por un lado, hacemos lo equivalente a lo que hacen los arquitectos: diseñamos estructuras con diferentes materiales en una escala millones de veces menor que un milímetro para obtener determinados efectos. Por el otro, hacemos un trabajo similar al de los sociólogos: buscamos entender qué propiedades diferentes pueden obtenerse cuando se tienen muchas partículas metidas en un mismo lugar. Las propiedades de uno o dos electrones no son las mismas que cuando se tienen millones. Por eso la mecánica estadística cuántica es la estrella en el campo de la física de la materia condensada.
La sociología no suele ser reconocida desde las ciencias duras…
Los que hacemos materia condensada somos un poco los sociólogos de la física. Las propiedades realmente novedosas e interesantes tienen que ver con el hecho de que hay comportamientos que son completamente inesperados en las partículas individuales, pero que, en determinados contextos de reunión, dan como resultado propiedades muy diferentes.
¿Significa algo para usted el nombre del premio?
Georg Forster fue un naturalista polaco-alemán, aventurero y comprometido socialmente. No solamente desarrolló su obra viajando por todo el mundo, sino que fue un verdadero visionario. Me gusta tener un premio con el nombre de este personaje que no solamente contribuyó a desarrollar una disciplina científica, sino que realmente generó muchas cosas, visiones diferentes sobre la ciencia y las instituciones en Alemania. Alexander von Humbolt, que es quien le dio el nombre a la Fundación, lo tomó como ejemplo. El tercer Reich repudió a Forster, pero fue una persona que influyó mucho en la cultura científica alemana en esto de tener paradigmas diferentes, algo que tiene mucho que ver con lo que hacemos en el ICAS de buscar generar dinámicas diferentes.
En el ICAS se desempeña como directora adjunta ¿Qué significa para usted hacer investigación y también estar gestionando una institución prácticamente nueva?
Estoy en una etapa de mi carrera como investigadora que es muy productiva, pero también estoy muy comprometida con el proyecto de hacer crecer al ICAS. Para mí, es una apuesta muy fuerte haberme mudado acá y creo que vale la pena porque estamos queriendo hacer algo nuevo. Siento que estoy involucrada en algo que dentro de la Argentina puede marcar un antes y un después.
¿Cómo es el antes y cómo sería el después?
La calidad de los recursos humanos en la Argentina es impresionante, pero, por diferentes motivos, la ciencia que se hace aquí no tiene el impacto internacional que debería tener. Estamos aislados, la dinámica es bastante endogámica, cada institución está muy encerrada en sí misma y muchas veces nos desconectamos de lo que está pasando afuera. En este sentido, el ICAS busca funcionar como un punto de reunión para investigadores de diferentes instituciones de la Argentina en el que también se genere un encuentro con investigadores del exterior. Eso, creo yo, puede tener un impacto superpositivo hacia el futuro. Para nosotros, es realmente un desafío.
Entre el 14 y el 18 de noviembre de este año se desarrollará el simposio Frontiers in Physical Sciences, organizado de manera conjunta por el ICAS y la Max Planck Liason Office for Latin America, en cooperación con el Programa Kolleg de la Fundación de Alexander von Humboldt y el apoyo del CONICET y el Ministerio de Ciencia y Tecnología. Esta actividad contará con la presencia de dos premios Nobel, uno en física y otro en química, y se espera que participen científicos de los diversos institutos Max Planck, así como científicos de otras instituciones europeas y de Estados Unidos en conjunto con científicos de varias instituciones de la Argentina y el resto de Latinoamérica. Se hablará sobre materia blanda, bioquímica, biofísica, nanocatálisis, óptica cuántica, átomos fríos, dinámica no lineal y sistemas complejos, entre otros temas. “Es una actividad que va a involucrar a mucha gente, muchos temas, muchas áreas. Será una presentación de lo que podemos hacer, mientras avanza la construcción del edificio en el que tendremos nuestro propio espacio para recibir investigadores”, informa Arrachea.
[…] la Escuela de Ciencia y Tecnología de la UNSAM. Entre otras distinciones, el año pasado obtuvo el Premio de Investigación Georg Forster de la Fundación Alexander von Humboldt, que reconoce la trayectoria de investigadores excepcionalmente calificados provenientes de países […]
Qué maravilla!!! Cuánto me alegra saber de tanta gran investigadora argentina gracias a la difusión de la UNSAM!! Ojalá se difundieran estos ejemplos modelos de posibilidad de desarrollo de las mujeres en todos los medios para comunicar y promover igualdad de género que tanta bien hace a la humanidad toda!