Instituto Dan Beninson, Notas de tapa
La decana del Instituto de Tecnología Nuclear Dan Beninson habla de las ventajas de la energía producida por reactores y evalúa el futuro de la actividad. “En Argentina la especialización en reactores es parte de una política activa de promoción, por el horizonte de desarrollo tecnológico y
conexión con la industria que le avizoran”, dice.
Por Rodolfo Petriz – Fotos: Verónica D´alia / Equipo de Comunicación UNSAM
Argentina pertenece al selecto grupo de países que dominan, tanto desde el conocimiento teórico como de las aplicaciones tecnológicas, todas las áreas de uso de la energía atómica para fines pacíficos: diseño y construcción de reactores, extracción y enriquecimiento de uranio, producción de combustible nuclear y agua pesada.
El Instituto de Tecnología Nuclear Dan Beninson (IDB), creado a fines del año 2006 gracias a un convenio entre la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y la UNSAM, colabora en el desarrollo del campo nuclear argentino y su articulación con otras sectores productivos mediante la integración interdisciplinaria de personal académico, científicos y técnicos. En este contexto, una de sus tareas es la formación de profesionales para gestionar las actividades propias del área nuclear. Así, desde el año 2007 el IDB ofrece dentro de su calendario académico la carrera de Especialización en Reactores Nucleares y su Ciclo de Combustible que se dicta en las instalaciones del Centro Atómico Constituyentes.
Los reactores nucleares son dispositivos en donde tienen lugar reacciones nucleares controladas. Pueden utilizarse para múltiples fines pacíficos, como la generación de energía eléctrica en centrales nucleares, la creación de radioisótopos útiles para la medicina o la industria, la investigación y desarrollo de tecnología nuclear o incluso para la fabricación de motores de propulsión marítima.
“La CNEA tiene una larga historia en desarrollos nucleares, especialmente en el área de reactores. En el Centro Atómico Constituyentes se encuentra el reactor RA1, el primero construido en Latinoamérica”, dice Carla Notari, decana del IDB y directora de la especialización en reactores nucleares. “Junto con ello, nuestro país tiene una experiencia única en la región ya que dispone de conocimientos que otros países no poseen. Y en el área educativa es líder en la formación de profesionales y técnicos”.
¿Qué antecedentes tiene esta carrera en Argentina?
En el formato actual es original de la UNSAM pero tiene como antecedente una maestría en reactores nucleares que dictamos en la Universidad Tecnológica Nacional, y muchos años antes el curso de ingeniería nuclear que se hizo en el departamento de reactores de la CNEA, donde se formaron los primeros ingenieros que trabajaron en Atucha I y Embalse. Así, si bien esta es una actividad que ya se hacía en distintos formatos en la CNEA, la asociación con la UNSAM nos dio un marco académico que antes no era lo suficientemente interesante.
¿Cuál es el perfil del egresado?
Nuestra orientación es para personal que vaya a trabajar en centrales nucleares, en reactores de producción de radioisótopos y en reactores de investigación. Por eso la carrera apunta fundamentalmente a un perfil profesional, esto significa que los egresados obtengan las herramientas para insertarse en cualquiera de los sectores de funcionamiento de estos dispositivos. Durante el año que dura la especialización se brinda formación práctica en seguridad nuclear, física de reactores, física nuclear, termohidráulica, ciclo de combustibles y planificación energética, entre otras áreas de relevancia.
¿Qué salida laboral tiene?
El ámbito de aplicación es relativamente restringido porque se limita al área nuclear, pero en Argentina la salida laboral es bastante amplia porque además de la CNEA, otras empresas asociadas al sector nuclear como Nucleoeléctrica Argentina S.A. –la empresa que controla las centrales nucleares argentinas–, CONUAR –fábrica nacional de combustible nuclear– o INVAP S.E., son destinos posibles de los egresados. También existen a nivel mundial buenas posibilidades de inserción, especialmente en centrales nucleoeléctricas.
Tras el reciente accidente en la central de Fukushima, en Japón, las centrales nucleares vuelven a ser cuestionadas ¿En qué situación operativa se encuentran en la actualidad?
El accidente de Chernóbil, en 1986, hizo que durante muchos años no se instalaran nuevas centrales nucleares en el mundo, sin embargo aún hay muchas en funcionamiento: alrededor de 450. De hecho la energía nuclear produce a nivel mundial una cantidad de electricidad similar a las hidroeléctricas, cerca del 14%. A pesar de este “parate”, ese porcentaje se ha mantenido constante durante estos años porque los equipos son cada vez más eficientes en su producción. Hay un parámetro, el factor de carga, que indica cuantas horas por año puede funcionar una maquina sin detenerse, en ese sentido las centrales nucleares son sobresalientes y llegan al 90%, un valor excepcional frente a cualquier otro tipo de generación. En el caso de las energías renovables, como la eólica, el factor de carga no llega al 20%.
¿Qué perspectivas a futuro tienen las centrales nucleares?
Si uno analiza las previsiones de prospectiva de instalación de nuevas centrales de distinto tipo que hace el Consejo Mundial de la Energía, las nucleares son una opción que siempre se tiene en cuenta porque pese ser muy cuestionadas, todas las formas de generación energética son cuestionables. La gran mayoría de la energía que se produce en el mundo proviene de combustibles fósiles, y estas son fuentes muy contaminantes porque producen cenizas y dióxido de carbono, contribuyendo a la mala calidad de aire y al efecto invernadero. A través del panel de cambio climático se está intentando inducir cambios en la matriz energética mundial, desplazando a las más contaminantes y dando lugar a las renovables, lo cual está muy bien. Sin embargo, la nuclear es la única que tiene un desarrollo comercial que permite sustituir en una gran proporción a la energía fósil, ninguna de las renovables puede hacerlo porque el recurso es discontinuo y la conexión a la red eléctrica es complicada. A pesar de ello, la nuclear siempre está en una situación dudosa porque aunque no produce dióxido de carbono, no se la acepta como una energía limpia por dos cuestiones: los accidentes y los residuos.
¿Cuán peligrosa es la energía nuclear?
El riesgo de accidente en una central nuclear es muchísimo menor que en otras plantas de generación de energía. El problema con la radioactividad es que no se ve ni se huele y en altas dosis puede ser letal. Esto produce mucho temor, pero es una fantasía que con una pequeña fuga pueda haber muchos muertos. El accidente de Fukushima no produjo ningún muerto por la dispersión del material nuclear.
¿Y el problema de los residuos?
Son pequeños en volumen comparado con las centrales de carbón o de petróleo. Pero son radioactivos, duran muchísimos años y le estamos pasando el problema a las generaciones futuras con soluciones que no están del todo cerradas. Es decir, no hay ningún repositorio final para los residuos, los que hay de momento son intermedios. Se están estudiando distintas maneras de reprocesar el combustible gastado para recuperar el material útil y reutilizarlo en los reactores, de manera que el residuo final sea el menor posible. De hecho, esto es una materia de investigación mundial y ya hay soluciones tecnológicas, lo que no hay son plantas comerciales que acepten combustible quemado para su disposición final, estamos yendo hacia ese escenario pero todavía falta.
Los reactores nucleares también se usan para la fabricación de radioisótopos, utilizados en la industria, el agro y principalmente en medicina. ¿Qué importancia tiene esta actividad en la Argentina?
Tenemos una posición privilegiada porque son reactores que se han desactivado en muchos lugares del mundo, por lo cual hay escasez de radioisótopos para distintos usos. Nuestro país produce radioisótopos para uso en medicina nuclear, como el molibdeno 99, con tecnología local y gracias al desarrollo de un método propio en el reactor RA 3 que la CNEA tiene en el Centro Atómico Ezeiza. Además tiene un proyecto en curso para construir un nuevo reactor, el RA 10 –muy innovador y basado en la experiencia adquirida en el RA 3 y en los reactores construidos a través de INVAP en el exterior–, para aumentar la producción porque la demanda está insatisfecha a nivel mundial.
¿Cuál es el grado de compromiso que tiene el Estado con la formación de recursos humanos en este sector?
Esta es una formación en tecnología que, si tuviéramos que cobrar lo que cuesta una pasantía en las centrales nucleares, o una hora de funcionamiento del reactor donde se realizan las prácticas, no la podría pagar nadie. En Argentina el sector nuclear lo sostiene el Estado y esta especialización es parte de una política activa de promoción, por el horizonte de desarrollo tecnológico y conexión con la industria que le avizoran. Si la política nuclear estatal fuera otra esta carrera no tendría sentido.
¿Qué otros proyectos en el área educativa tiene el Instituto?
Este año presentamos a la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (CONEAU) un proyecto de doctorado en Tecnología Nuclear. Está muy vinculado con la especialización en reactores y con el otro posgrado que ofrecemos, la Especialización en Radioquímica y Aplicaciones Nucleares. Este doctorado está dirigido a quienes les interesa la investigación y el desarrollo, y así pretendemos cubrir una amplia serie de especialidades tecnológicas que van desde medicina nuclear, radiobiología, reactores nucleares o radioquímica, todas las áreas donde el sector nuclear argentino desarrolló mucha experiencia. Ya tenemos unos cuantos interesados y pretendemos comenzarlo el próximo año, solo estamos esperando la autorización de la CONEAU.
Que tal, mi nombre es Agustin. Soy egresado reciente de secundaria con el titulo Tecnico Mecanico… Me entere que hay una pasantia para el nuevo reactor. Si me pudieran brindar un poco mas de información agradecería mucho ya que quiero seguir esa carrera.
Muchas gracias
Muy buena e interesante es la carrera, aunque me da un poco de miedo x la fisica!!! Me gustaria saber como hago para inscribirme, y hasta cuando tengo tiempo ? Que debo presentar? Horarios de asistencia a clases?
Por favor consultá en el Instituto Beninson: infoidb@cae.cnea.gov.ar
Saludos!
Muy interesante esta nota. Justamente estaba interesada en la Tecnicatura en aplicaciones nucleares así que agradezco la publicación de esta nota porque es muy informativa.