Por Daniela Barrera. Fotos: Ludmila Sívori 

“’La universidad entró a mi casa’, dijo una vez Mónica Salvatierra, una compañera. Y una siempre se imagina el camino contrario. Por eso el conocimiento compartido, socializado, llevado al territorio, nos permite enriquecernos como personas. Podemos tener certificados para empapelar la casa, pero si no ponemos en práctica esa teoría para comprender qué es una situación problemática de consumo no podríamos ayudar. Queríamos solucionar nuestros problemas personales y después nos fuimos formando y transmitiendo ese conocimiento. Hoy podemos saber más gracias a la comprensión que nos brindó esta cátedra y tenemos un compromiso y una responsabilidad con la sociedad”, declaró Beatriz Maciel, exalumna de la Cátedra, integrante de organizaciones sociales de José C. Paz y formadora de agentes de promoción en prevención.

El de Bety fue uno de los varios testimonios que formaron parte del encuentro del lunes 28, en el Campus Miguelete, por el décimo aniversario de la Cátedra Libre para la Adecuada Atención de Personas con Consumo Problemático de Sustancias Psicoactivas.

El rector Carlos Greco reconoció a la Cátedra por cumplir con los tres pilares de la Universidad —asociativismo, tradición e innovación—, por su capacidad de dar respuestas a la sociedad y por su compromiso con una formación que es sostenida por el Estado e implementada en el territorio como una tradición a sostener y defender.

Por su parte, el secretario de Gobierno y Relaciones Institucionales, Héctor Mazzei, recordó cómo el juez Eugenio Zaffaroni le propuso llevar esta capacitación al conurbano y cómo, con una mirada vocacional, la Cátedra dejó de llamarse “de adicciones” para poner el foco en la persona y el tratamiento del consumo.

La coordinadora de la Cátedra, Susana González, agradeció y nombró a instituciones, docentes, equipo y autoridades e hizo hincapié en la condición de libre acceso que ofrece la Cátedra y en su interdisciplinariedad, lo que permite abordar los aspectos necesarios para que la persona reciba una atención adecuada. “Traemos acá nuestras convicciones y trabajamos con ellas”, celebró.

Cecilia Lucero, decana del Instituto de Ciencias de la Rehabilitación y el Movimiento (ICRyM), explicó que la perspectiva del Instituto está basada en un concepto amplio de salud y aseguró que recibir la Cátedra “fue todo un desafío, ya que involucra a diversos actores, con múltiples aspectos, a la vez que interpela el rol de la justicia y los discursos dominantes”. En esa línea, adelantó: “Nos sentimos muy honrados de tener esta formación que hoy es cuatrimestral y a partir de la cual se proyecta una Diplomatura que está pronta aprobarse”.

También participaron aportando sus miradas exestudiantes, el diputado Leonardo Grosso, integrantes del equipo como Adrián Colaciatti y el docente Alberto Calabrese, entre otrxs. Por su parte, referentes de organizaciones culturales como Martín Elsesser, uno de los creadores de Cine en Movimiento que fue alumno de la primera cursada de la cátedra en 2012, exhibieron videos realizados con estudiantes en los que, además de actuar como protagonistas, también intervinieron en el guión, la filmación y la edición.

Sobre la Cátedra

A partir de 2022, la Cátedra Libre para la Adecuada Atención de Personas con Consumo Problemático de Sustancias Psicoactivas comenzó a tener una duración de 1 cuatrimestre y continúa en modalidad virtual, gratuita y abierta a todo público.

En septiembre pasado, lxs docentes Edith Benedetti, Marcela Raiden y Ricardo Paveto participaron del XV Congreso de Salud Mental AASM 2022, presidido por el profesor Calabrese. Expusieron en una mesa redonda coordinada por Susana González en el marco del 5.° Congreso de Consumos Problemáticos.

La próxima cursada será en abril de 2023. Para inscripciones consultar a catedraadicciones@unsam.edu.ar

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