Por Silvina Di Cristófaro

Desde hace dos años y gracias a un Convenio con el Ministerio de Educación, el Centro TAREA de la Escuela de Arte y Patrimonio (EAyP) dio comienzo a las tareas de restauración y conservación de los murales de Benito Quinquela Martín ubicados en dos escuelas del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. En una primera instancia, se finalizó la obra Trabajo, ubicada en el patio interno de la Escuela Primaria N.° 7  “República de México”, en el barrio Santa Rita-. Luego, se dio comienzo a los trabajos de recuperación de los murales de la Escuela-Museo N.º 9 “Pedro de Mendoza”, en La Boca: Cargadoras de Naranjas en Corrientes finalizado en el 2019, y Buzos en el fondo del  mar, inaugurado a comienzos de este mes con un acto emblemático al que asistieron autoridades del Ministerio de Educación de la Ciudad, de la Escuela y de la UNSAM, además de muchxs docentes y estudiantes involucradxs en los trabajos de restauro.

De los quince murales del artista que se encuentran en la Escuela N.º 9, Buzos en el fondo del mar, incluso restaurado- es notablemente más oscuro en relación a sus otras obras. Sin embargo, como en las demás, la temática fundamental que subyace es siempre el trabajo o escenas populares de la vida en la zona portuaria. Estas obras de arte, de un valor único y cargadas de un profundo sentido social, son parte del patrimonio histórico y cultural de la Ciudad de Buenos Aires. 

El encuentro entre el arte y la comunidad es intrínseco a la obra del artista: se evidencia en los paisajes e imágenes populares, pintados armoniosamente y con una proporción áurea exquisita, y también en el contacto que cada estudiante experimenta con la obra de arte allí expuesta permanentemente en su propia aula, abriendo paso a un cíclico  intercambio entre el arte y lo social y generando una experiencia transformadora desde el momento en que cada estudiante observa la obra al alcance de su pupitre. 

“La importancia de estos murales reside en que se trata de un caso único en el mundo en el que un artista facilita el terreno, construye la escuela y dona sus murales para cada una de las aulas”, comentó la directora del Centro TAREA, Damasia Gallegos, durante el acto de entrega. Además, remarcó la intervención de restauradorxs profesionales y también de estudiantes avanzadxs de la Licenciatura en Conservación y Restauración del Patrimonio Cultural. Su compromiso con la intervención se sirve de herramientas pero también de un arduo estudio de la obra y su contexto, relevamientos preliminares y análisis químicos de muestras. “Se hace un largo trabajo previo, de un mes, investigando los materiales usados en cada mural y su historia”, cuenta Judith Fothy, responsable del proyecto.

La restauración progresiva de los murales de Quinquela, que datan de 1936, comenzó hace dos años y si bien se se vio afectada por la pandemia, actualmente y manteniendo  protocolos necesarios, los restauradorxs continúan con sus tareas de recuperación sobre el tercer mural, para devolver el sentido original que el pintor imprimió en cada uno de ellos y que de algún modo hoy se ve afectado por el paso del tiempo. En este sentido, dar cuenta de la importancia del patrimonio, de la obra mural como construcción social y del encuentro transformador entre cada una de ellas con lxs 390 estudiantes que asisten a la Escuela-Museo de La Boca genera un sentido de pertenencia y resignifica el patrimonio cultural. 

El trabajo estuvo a cargo de las restauradoras Judith Fothy y Damasia Gallegos. Participaron: Luciana Feld, egresada de la Especialización en Conservación y Restauración de Bienes Culturales de la Escuela de Arte y Patrimonio; Zulma Abate, Marina Ottone y Michele Pereyra Casado, estudiantes avanzadas de la Licenciatura en Conservación en Restauración del Patrimonio Cultural. Del mismo modo, estudiantes de la cátedra “Métodos y Técnicas para la conservación de pintura” realizaron prácticas de reintegración pictórica en la etapa final de la restauración del mural, lo cual incluyó la consolidación de la capa pictórica, nivelación de la superficie, remoción de repintes y barnices oxidados y el acabado final.

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