La inauguración de la Feria siempre fue una fiesta esperada y preparada a lo largo del año. El Tornavía cobraba colores, sonidos y miles de historias nucleadas en los stands que invitaban a ser descubiertos. Lxs estudiantes recorrían el Campus como un espacio de pertenencia, no tan ajeno y próximo a ser habitado. La música y los testimonios se extendían por completo en la Universidad y sin dudas, la apertura nos hubiera encontrado a todos en el auditorio Carpa, esperando que las autoridades dieran formalmente inicio. Este año todo fue diferente, pero sin embargo, todo estuvo allí, lxs estudiantes, lxs docentes, la emoción, la ansiedad, las miles de historias, voces y miradas testigos de sus relatos. La Feria es siempre, como plantea el rector Carlos Greco, una oportunidad para agradecer y recibir de otras experiencias del saber y es “un espacio de construcción colectiva que sintetiza los pilares de la UNSAM en la educación y la investigación” donde se facilita el acceso y la interacción. 

La Feria es la convicción del valor del diálogo en torno al saber “genuino, con tradiciones, con interrogantes a resolver porque es la forma de construir ciudadanía con los jóvenes” y especialmente porque en sus inquietudes reside la pasión por descubrir, habitar y transformar la sociedad. Las 146 producciones están cargadas de sentido y cada una de ellas conmueve “desde lo intelectual y desde lo afectivo” enfatizó Silvia Bernatené, decana de la Escuela de Humanidades.

El último año de secundario marca una etapa de incertidumbre en condiciones habituales, lxs jóvenes se acercan a pensar algunas definiciones de sus actividades, pensar el tiempo próximo y estas acciones acompañan y dan sentido formativo a sus búsquedas. Es importante una universidad que abre sus puertas y articula esfuerzos con otras instituciones readaptando la Feria y repensando cuestiones centrales como, la identificación, la grupalidad y la participación estudiantil y el plan de egreso para la continuidad de estudios.

La Feria de este año requirió un proceso de reconversión y más que nunca un trabajo de articulación del sistema de educación público y de compromiso con el territorio. Fue también un acto de creatividad y un aprendizaje para encontrar la mejor alianza con la tecnología que permitiera llegar a todo el territorio y garantizar el derecho de acceso a la educación para todxs.  

Lxs protagonistas fueron una vez más, los relatos de lxs estudiantes pero junto a ellos,  la experiencia de lxs maestros que sostuvieron las escuelas en la virtualidad y crearon puentes para acompañarlxs. En diálogo con ellxs nos regalaron algunas frases que guardaron como parte de este recorrido:

“La virtualidad nos impuso un gran desafío, estábamos acostumbrados que los procesos de enseñanza transcurrían en la escuela, encuentros virtuales, audios, textos y cada palabra cobró un valor especial para darnos cuenta cómo nos sentimos desde casa, cuando tanta falta nos hace un abrazo” (Patricia Lisi, EES N° 50)

“El elemento común es la espera de la actividad, del mensaje, de la noticia del otro y eso habla mucho del vínculo entre estudiantes y docentes que es más importante que el contenido a enseñar” (Nicolás Mazzeo, EES N° 6 Alfonsina Storni)

“Estando en aislamiento las situaciones que viven en los hogares se vuelven más intensas. Nos dimos cuenta cuando algo quedó en silencio, dejamos de recibir mensajes y sin embargo, lograron la confianza de contar lo que pasaba. Les cuesta comunicar las cosas, por eso se valora mucho lo que pudieron poner en palabras” (Cynthia Guzman, EES N° 44 Dr. René Favaloro)

“Hubo que construir propuestas pedagógicas y tiene que ver con saberes, proyectos, y una pluralidad de ideas y prácticas muy valiosas que se materializaron a través de actividades en el ecosistema digital. Empezamos a aprender ese lenguaje y la forma de vincularnos” (Germán Rodriguez, EEM N° 2 DE 20)

“Extrañaban jugar juntos, entonces  organizamos una semana de festejos de juegos. Se sintieron tensos, estresados y con mucha adrenalina. Son sujetos con ganas, con saberes, cultura, potencial pero a veces la escuela no habilita estos espacios. Siempre hay que hacer” (Ana Laura Pittaluga, EEM N° 2 DE 20)

La pandemia toca viejas cuestiones y nuevos problemas que nos convocan a pensar nuevos lenguajes para comprender nuevos códigos y desarrollar otras formas de comunicarnos en sociedad. Especialmente el desafío de pensar el sentido de las prácticas dentro de las escuelas. Esta Feria visibilizó la potencia de la transformación en cada una de las producciones y en las frases vivenciadas por lxs docentes, como registros poderosos de una huella de acción que ha modificado como cada año, la vida de docentes y estudiantes. 

En el cierre de la apertura compartimos la canción de Camila Godoy Salir que cuenta maravillosamente la necesidad “que el sol nos pegue en la cara”. Te invitamos a escucharla

Lxs invitamos a disfrutar de las 151 producciones presentadas por las escuelas secundarias que alojadas en el micrositio de la Feria aquí

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