Consejo Superior, Notas de tapa
Tres comisiones integradas por todos los claustros de la Universidad confeccionaron el anteproyecto de un nuevo estatuto. El texto, que reemplazará al de 1997, incorpora nuevos derechos y establece una mayor representación de los claustros, la paridad de género y la limitación de los mandatos. También garantiza la transparencia en los procesos de gestión institucional.
Desde hace más de un año, los tres claustros de la UNSAM trabajan en la revisión del Estatuto para su reforma y actualización. Es un camino que se inició al poco tiempo de asumir la actual conducción de la Universidad, cumpliendo con una de las iniciativas formuladas en las Bases Programáticas para el período 2018-2022 y considerando las inquietudes y propuestas vinculadas con aspectos centrales de la vida universitaria que se recibieron de parte de la comunidad (docentes, no docentes, estudiantes, graduados).
¿Qué importancia tiene un estatuto y por qué es necesaria su reforma? El estatuto es la “herramienta madre” que establece los principios básicos que guían las acciones de la universidad y la forma en que se organiza para cumplir sus objetivos. El estatuto actual de la UNSAM fue confeccionado en 1997, cuando la Universidad atravesaba su etapa fundacional. Veintidós años después, la UNSAM se ha consolidado como una referencia de calidad, innovación, pluralidad, internacionalización y compromiso con su entorno y multiplicado la cantidad de estudiantes, docentes, investigadores/as y graduados y graduadas. “Un nuevo estatuto deber dar cuenta de ese crecimiento, dar respuestas a las demandas de la comunidad y reflejar más acabadamente la cultura y los desafíos del siglo XXI”, dijo el rector Carlos Greco durante el plenario de comisiones que trabajaron en la reforma del documento.
Las comisiones que elaboraron el anteproyecto hicieron una reunión plenaria el 10 de octubre, durante la cual se puso en común el trabajo realizado por cada comisión. Lo que sigue será un proceso de información, consulta y debate al interior de cada área de la Universidad, con una instancia complementaria virtual abierta a toda la comunidad UNSAM a partir del 28 de octubre. Luego de ese proceso, el anteproyecto será tratado por la Asamblea Universitaria.
La propuesta del nuevo estatuto fue elaborada por tres comisiones integradas por representantes de todos los claustros y de todos los sectores de la vida universitaria. Después de más de un año de trabajo, esas comisiones —asistidas por personal profesional y técnico de las Secretarías de la Universidad— produjeron dictámenes unánimes que fueron dando cuerpo al anteproyecto. “Lo que estamos haciendo es fortalecer los claustros a través de la estructura orgánico-académica con mayor representatividad, mayor pluralidad. Porque ese fue el compromiso con el que asumimos”, dijo Greco.
El nuevo estatuto incorpora un Preámbulo que establece un ideario integrado por el reconocimiento del legado reformista y la gratuidad de la educación superior, más un núcleo de valores en defensa de los derechos humanos y los principios democráticos, la justicia social, la justicia de género, el desarrollo sostenible y la concepción de la educación superior como bien público y social, así como el reconocimiento de la asociatividad con instituciones y organismos con valor estratégico para la prosecución de los objetivos institucionales.
También se incorpora la posibilidad de crear Consejos Consultivos como forma de integrar distintos estamentos de la sociedad a la vida universitaria.
Otro de los objetivos de la reforma es una mayor institucionalidad y democratización de la organización académica mediante la aplicación de nuevos criterios para definir las unidades académicas: Escuelas e Institutos Asociados (en convenio con otras instituciones). En la nueva estructura académica se garantizará la participación de docentes, no docentes y estudiantes en el cogobierno de las unidades académicas. Además, la propuesta fomenta la cooperación, la vinculación y la integración entre áreas de conocimiento o campos disciplinarios afines potenciando las capacidades existentes en las distintas unidades académicas.
También se da reconocimiento a la enseñanza preuniversitaria como una de las actividades que desarrolla la Universidad.
El nuevo estatuto busca el fortalecimiento y consolidación del cogobierno universitario: mayor representación de claustros, paridad de género y limitación de mandatos.
La propuesta duplica la cantidad de representantes de los claustros estudiantiles y no docentes en el Consejo Superior de la Universidad. Se incorpora el principio de paridad de género en la confección de las listas de candidatos/as a consejeros/as para las elecciones de claustros de todos los órganos colegiados (Consejo Superior y Consejos de Escuelas) y se limitan las reelecciones para todo tipo de cargos electivos unipersonales (rector/a, decanos/as y directores/as) y colegiados de todos los claustros (docentes, estudiantes y no docentes).
El anteproyecto que se pondrá a consideración establece nuevos derechos para todos los claustros que conforman el gobierno de la Universidad. En el caso de los docentes, se incorporan nuevos derechos referidos a la participación política; el ingreso a la carrera académica; la actualización y perfeccionamiento disciplinar; el acceso a becas y/o programas de fortalecimiento ligados a la calidad de la enseñanza; y el acceso a la información académico-institucional.
Se incorporan derechos para el claustro estudiantil. Estos derechos refieren al acceso a la institución sin discriminaciones; a la participación política en la vida institucional, centros de estudiantes y federaciones; al uso de espacios físicos, recursos materiales y bibliográficos; al régimen de licencias generales y especiales; a las becas y otras formas de apoyo económico; a la información académico-institucional; y a la participación en iniciativas de formación, investigación y extensión.
Para el caso de los no docentes, el anteproyecto incluye derechos referidos al acceso a la institución sin discriminaciones; a la participación política en la vida institucional; a agremiarse libremente; al acceso a la carrera administrativa; al régimen de licencias; al acceso a becas y otras formas de perfeccionamiento y capacitación; y al acceso a la información académico-institucional.
El anteproyecto de Estatuto 2019 reconoce la importancia de garantizar la transparencia y la responsabilidad en los procesos de gestión institucional: se incorpora como obligatoria una reunión anual de la Asamblea Universitaria para recibir el Informe de Gestión por parte del Rector o Rectora, y para aprobar la cuenta de inversión, ahorro y financiamiento de la Universidad.
Estos cambios representan un avance en materia de transparencia, responsabilidad y rendición de cuentas de la gestión universitaria estableciendo nuevas facultades para la Asamblea Universitaria, el Consejo Superior y los Consejos de Escuelas y nuevos deberes para las autoridades ejecutivas unipersonales (rector/a y decanos/as).
El funcionamiento de la Unidad de Auditoría Interna adquiere rango estatutario. Y se establece que este organismo funcionará con absoluta independencia de criterios para asegurar la aplicación de los sistemas de control interno.
“Este estatuto es un nuevo hito para la historia de la UNSAM. Entendemos que ya pasamos el proceso fundacional, que tenemos una historia institucional que tuvo un crecimiento, un desarrollo, una expansión. Llegó el momento de contar con un instrumento que no es ni más ni menos que una guía que nos permita relanzar la Universidad, reconfigurarla, redefinirla, fijar nuevos valores y generar las condiciones para que, ineludiblemente, nos transformemos en una universidad del siglo XXI”, dijo Greco en el último Plenario de Comisiones de Reforma del Estatuto.
Soy Docente de la Escuela de Economía y Negocios desde hace más de 20 años, estoy comprometida y me siento parte de esta Universidad, por tanto no puedo más que celebrar esta iniciativa que seguramente va a permitir optimizar muchos aspectos de la la convivencia institucional y sentará las bases para los años que vienen.
EXCELENTE trabajo
seguramente podremos seguir teniendo información mas abundante acerca del funcionamiento del nuevo estatuto
me gustaria mas participación a los docentes de institutos, e informes sobre los avances
Sin duda todo cambio es necesario para actualizar los campos disciplinares y academicos de UNSAM