Instituto de Investigación e Ingeniería Ambiental
En el Día Internacional del Agua, la investigadora y docente del Instituto de Investigación e Ingeniería Ambiental de la UNSAM analiza los objetivos de la Agenda 2030 de la ONU que buscan garantizar el acceso universal al agua potable.
Marta Litter es investigadora y docente del Instituto de Investigación e Ingeniería Ambiental (3iA) de la UNSAM y especialista en tecnologías avanzadas para la remoción de contaminantes. Estudia las propiedades de remoción de las nanopartículas de hierro, que reducen la concentración de arsénico y de varios metales en el agua.
En el Día Internacional del Agua, Litter analiza los Objetivos para el Desarrollo Sostenible planteados por la ONU, que para el año 2030 proyecta un acceso universal al agua potable y segura.
“Hablamos de un recurso escaso. Si bien contamos con la misma cantidad de agua que hace unos 3800 años, hoy existe un problema en su distribución, que es muy desigual”, dice Litter, que trabajó en fotocatálisis heterogéneas, reacciones de Fenton y foto-Fenton y reacciones con ultrasonido. “Ahora investigo las sales de hierro, que mezcladas con extractos de yerba mate o té verde forman unas nanopartículas muy eficientes para reducir la concentración de contaminantes en el agua”, cuenta.
En 2018 Litter fue incorporada a la Academia TWAS. Además colabora con el Plan Nacional del Agua de la Subsecretaría de Infraestructura y Política Hídrica. “El acceso al agua segura es un derecho humano. La desigualdad en su distribución hace que muchas personas no puedan consumir un agua potable y libre de microorganismos perjudiciales para la salud”, señala.
“El problema es que en los grandes asentamientos periurbanos la población toma agua de pozo”, dice Litter. “Esa agua puede contener arsénico y metales como cromo, plomo, cadmio o uranio, que son muy tóxicos y causan enfermedades”.
Litter sabe que los problemas ambientales están relacionados con la pobreza estructural, sobre todo en América Latina. “Los habitantes de zonas urbanas precarizadas consumen agua contaminada. Al mismo tiempo, son los más afectados por el calor, las inundaciones y el frío extremo”.
Sin embargo, frente a algunas perspectivas ecologistas que postulan que habría que abandonar ciertos métodos de producción, Litter asegura que el desarrollo industrial es necesario no solo para el crecimiento de las economías, sino también para la creación de empleo.
“Lo importante es erradicar la pobreza. Para eso, la distribución de los recursos es clave. El acceso al agua segura es un derecho humano”, dice Litter, convencida de que el acceso al agua segura debe ser una política de Estado.