En 1946 Juan D. Perón asignó activistas sindicales a todas las embajadas argentinas del mundo para promover su versión del Estado de Bienestar. Unos 500 sindicalistas obtuvieron su título de Agregado Obrero en la siguiente década. Fue la mayor presencia del movimiento obrero en la historia de las relaciones exteriores.

El análisis de esa experiencia abre una puerta a las potencialidades y limitaciones de los proyectos populistas de posguerra y ayuda a ver la compleja relación entre el activismo peronista y su líder como una clave para entender la larga vida de la identidad peronista.

Ernesto Semán es escritor y profesor de Historia Latinoamericana en la Universidad de Bergen (Noruega). Su último libro es Ambassadors of the Working Class. Argentina’s International Labor Activists and Cold War Democracy in the Americas (Duke University Press, 2017)

Actividad abierta y gratuita.

Día y horario: Jueves 12 de julio, 19 h

Lugar: Fray Luis Beltrán 125 (CABA)