UNSAM en los Medios

Karina Bidaseca escribe sobre #Ni una menos en Página 12

La coordinadora del Programa Poscolonialidad, pensamiento fronterizo y transfronterizo en los estudios feministas del IDAES dedicó una columna de opinión al tema del femicidio, tras la movilización del 3 de junio que congregó a miles de personas frente al Congreso.

“En 1995, Susana Chávez acuñó la consigna ‘Ni una más’, que identifica la lucha contra los feminicidios en México. La escritora y activista, que escribiera Sangre en homenaje a una de las tantas mujeres muertas, apareció asesinada en 2011. A esa consigna le siguió ‘Ni una mujer menos, ni una muerta más’. No se trataba tan sólo de un problema del lenguaje. Era un tema de cuentas. La cuenta que no (nos) cierra. No queremos que nos arrebaten a otra mujer de la comunidad de mujeres. Por eso las contamos: 1808 asesinadas, 700 desaparecidas, 400 huérfanos… Jacques Rancière escribiría en un notable libro, El desacuerdo. Política y filosofía: ‘La política existe cuando el orden natural de la dominación es interrumpido por la institución de una parte de los que no tienen parte’. La política es “aquella actividad que rompe la configuración sensible donde se definen las partes y sus partes o su ausencia por un supuesto que por definición no tiene lugar en ella: la de una parte de los que no tienen parte (…) Es la que desplaza a un cuerpo del lugar que le estaba asignado o cambia el destino de un lugar; hace ver lo que no tenía razón para ser visto, hacer escuchar un discurso allí donde sólo el ruido tenía lugar, hace escuchar como discurso lo que no era escuchado más que como ruido’. Las contamos todxs. Los familiares, las mujeres, los movimientos de mujeres, las feministas, la sociedad. Y nos faltan. La cuenta no nos cierra. Pedimos por eso que el Estado nos brinde los datos. Queremos la cuenta exacta. Sus vestidos (están) colgando de las perchas, sin los cuerpos. Los zapatos rojos esparcidos por las calles, para traerlas a la memoria. Las contamos para exigir lesa humanidad. Pero aún debemos comprobar la sistematicidad. El feminicidio –o femicidio– para quienes nos dedicamos a investigar los feminicidios y devolver el conocimiento que producimos al servicio de la sociedad, esa indistinción, seguro pueda resultar una “exquisitez”. Lo que importa es que hoy todas y todos compartimos el mismo lenguaje y exigimos que la cuenta cierre. De una vez por todas. Que nos devuelvan a las desaparecidas por la trata. Ni una mujer menos, ni una muerta más. Las queremos a todas de regreso a casa.”

 

Para ver nota completa, clic aquí

Nota actualizada el 5 de junio de 2015

No están permitidos los comentarios.