Durante la Asamblea se pronunciaron más de quince oradores, entre ellos, decanos y consejeros representantes de los claustros docente, estudiantil y del personal de administración y servicios, quienes brindaron su apoyo a la continuidad de la actual conducción de la Universidad.

Luego de agradecer a la Asamblea y a su equipo de gestión, Carlos Ruta dijo: “Estamos convencidos de que los dos valores que definen la vida universitaria son el compromiso con el desarrollo y la justicia social”.

El Rector señaló que el principal objetivo de una comunidad universitaria es que los alumnos sientan que están en una casa que los cobija y ama: “Sin ese amor, sin esa pasión, es imposible hacer una carrera universitaria en medio de un mundo que les dice que el único sentido de la vida es consumir y tener para consumir”. Luego, remarcó: “Nosotros hemos hecho una apuesta al conocimiento, al arte, a la poesía, a aquello que es intangible, que no se puede comprar ni vender, que no se puede consumir. Que sólo es. No se puede comprar un científico; se es un científico. No se puede comprar un artista, se es un artista. No se puede comprar un estudiante, se es un estudiante. No se puede comprar una buena persona, se es una buena persona”.

Carlos Ruta también enumeró los desafíos: mejorar aún más la interacción entre las diversas disciplinas y los equipos de investigación, incrementar la cooperación con diferentes instituciones, reducir los índices de deserción, fortalecer los lazos de pertenencia de los alumnos egresados, y convocar a los mejores docentes e investigadores. Y definió los cuatro rasgos más relevantes de la UNSAM: es una universidad de investigación, tiene un ambiente estimulante para la innovación, un cuerpo docente empeñado en brindar una enseñanza de calidad y conforma una comunidad con compromiso social. “Que nuestros edificios estén llenos de jóvenes, investigando, produciendo, enseñando, creando”, precisó.

Con respecto al compromiso social, una de las ideas fundantes de la Universidad, dijo: “En el conurbano hay 255.000 jóvenes de entre 14 y 24 años que ni trabajan, ni estudian, ni buscan trabajo. También somos responsables de esos jóvenes”.

Por su parte, el vicerrector Daniel Di Gregorio remarcó como una construcción colectiva de la comunidad UNSAM el segundo proceso de Autoevaluación Institucional realizado 2012, que posibilitó a su vez la evaluación externa de la Comisión Nacional de Evaluación Universitaria (CONEAU), a mediados de 2013.