#DatosUNSAM, Secretaría de Internacionalización y Cooperación Internacional, Secretaría de Planificación y Evaluación
En esta segunda edición de #DatosUNSAM, un ciclo impulsado por la Secretaría de Planificación y Evaluación para contar lo que somos a partir de evidencia empírica, la secretaria de Internacionalización y Cooperación Internacional destaca la atractividad de nuestra universidad en base al aumento de estudiantes extranjerxs y propone: “La diversidad cultural es una de las raíces del desarrollo, no solo en términos de crecimiento económico, sino también como medio para lograr una vida intelectual, afectiva, moral y espiritual satisfactoria”.
Viernes por la tarde, Campus Miguelete, primera clase del primer cuatrimestre de 2023. Asignatura: Cooperación Internacional. Carrera: Licenciatura en Relaciones Internacionales. Voces, acentos, tonos, modismos. Durante la presentación mutua surgen vocaciones similares, procedencias diversas, estudiantes del interior del país; otros/as muchos/as, de fronteras afuera. Conozco a más de uno/a por ser estudiantes internacionales de intercambio, pero reparo en aquellos/as que nos han elegido como destino académico para realizar toda su carrera. Estudiantes de Haití, España, Perú, Venezuela, Bolivia.
Solemos asociar la internacionalización y la cooperación académica con la movilidad y los convenios, pero es necesario destacar que 1200 estudiantes de grado y posgrado de la UNSAM son extranjeros/as. Ellos/as se suman a los más de 200 estudiantes de distintas partes del mundo que, atraídos por diversos programas de intercambio, hoy son parte de nuestra comunidad académica.
De aquellos/as que eligen nuestra universidad para realizar una carrera completa, un 4 % cursa carreras de grado mientras que, en el caso de los posgrados, este número se eleva a un 16 % superando las estadísticas nacionales (8 % en la gestión estatal). Este último porcentaje es relevante no solo porque muestra la atractividad de la UNSAM, sino porque revela la interculturalidad como dimensión internacional de la formación en maestrías y doctorados. Es importante también resaltar que, entre 2018 y 2022, esos porcentajes se mantuvieron relativamente estables, es decir que la decisión de estudiar en la Argentina como migrante o expatriado/a es constante, pre y pospandemia, aunque los datos preliminares de 2023 indican un leve incremento.
Si analizamos los lugares de procedencia, 9 de cada 10 estudiantes de grado provienen de países de América Latina y el Caribe. A ellos/as se suman también más de 20 países europeos como lugar de origen, además de China, Sudáfrica, Guinea Ecuatorial o Australia. Los números de la UNSAM son similares a los que muestra el sistema universitario argentino: de acuerdo con los reportes de 2022 de la Secretaría de Políticas Universitarias (SPU), el 95,93 % de los/as estudiantes extranjeros de grado proviene de países de América; un 2,9 %, de países de Europa; y el 1,17 % restante, de Asia, África y Oceanía.
Históricamente, la construcción del sujeto que decide migrar de su país de origen ha estado ligada a una clasificación y tipificación no necesariamente positiva. En este sentido, el juego de luces y sombras entre lo cuantificado y las políticas públicas entra en tensión. Notemos que “son muchos los factores a nivel individual, institucional, nacional y global que impulsan la movilidad internacional de los estudiantes. Entre ellos, se incluyen las ambiciones personales y las aspiraciones a mejores perspectivas de empleo, la búsqueda de una experiencia académica internacional de calidad, la capacidad de las instituciones de educación superior en el extranjero para atraer talento y las políticas gubernamentales para fomentar la movilidad transfronteriza para la educación” (Bhandari, Robles y Farrugia, 2018). Asimismo, como fenómenos globales, las necesidades de las nuevas economías basadas en el conocimiento e impulsadas por la innovación han estimulado la demanda de educación superior en todo el mundo, mientras que el aumento de la riqueza en las economías emergentes ha impulsado a crecientes clases medias a buscar oportunidades educativas en el extranjero.
Para sumar argumentos sobre el impacto económico de la internacionalización de la educación superior puedo mencionar diferentes estudios que han demostrado que la presencia de estudiantes extranjeros tiene un efecto positivo tanto en la rentabilidad privada como en la rentabilidad social en los países de origen y de recepción (Di Pietro 2015, Kahn y MacGarvie 2011, Vickers y Bekhradnia, 2007; Wilkinson, Merwood y Masgoret, 2010, Conejero 2018-2021).
La información aquí presentada, que muestra un aspecto valioso de nuestra realidad universitaria, también nos permite enmarcar con contundencia la conjunción de una serie de derechos que consideramos indisputables: el derecho a la educación superior, el derecho a migrar y el derecho a la diversidad. Cómo mirar para ver, también en la UNSAM, para que el 12 de Octubre, Día del Respeto a la Diversidad Cultural, no solo sea un día para “respetar” el multiculturalismo, sino para hacerlo propio como parte de nuestra identidad.
Para cerrar, entre varias alternativas elijo compartir el Artículo N.º 3 de la Declaración Universal sobre la Diversidad Cultural, aprobada en noviembre de 2001 por las Naciones Unidas, que entiende la diversidad cultural como factor de desarrollo: “La diversidad cultural amplía las posibilidades de elección que se brindan a todos; es una de las raíces del desarrollo, entendido no simplemente en términos de crecimiento económico, sino también como medio para lograr una vida intelectual, afectiva, moral y espiritual satisfactoria.”
En 2010, luego de un terremoto en su país, Jean Bonaparte vino a la Argentina, donde solo tenía un conocido, con la idea de vivir y estudiar. Después de cursar Medicina en la UBA, eligió la Licenciatura en Relaciones Internacionales de nuestra Escuela de Política y Gobierno (EPyG) porque le gustó su programa de estudios y la posibilidad de estudiar en una universidad pública, gratuita y de calidad.
“Como extranjero, hoy me siento muy orgulloso en un país que no es el mío, pero que me permitió estudiar en la universidad pública. Yo sé que acá la universidad pasa por momentos difíciles, con las críticas de la agenda política ante las elecciones, pero yo soy el ejemplo de que con esfuerzo se pueden lograr grandes cosas: vengo de Haití, un país muy pobre en el que no pude estudiar, pero acá en la UNSAM pude cumplir el sueño de recibirme”.
Hoy Jean trabaja en una importante empresa de software y proyecta comenzar la Maestría Internacional en Derechos Humanos y Democratización en América Latina y el Caribe del CIEP-UNSAM. Además, quiere profundizar en su tesina de grado Derechos humanos y reparación histórica del colonialismo en Haití, que fue dirigida por Mariela Cuadro, directora de la carrera.
Al recibir su diploma en el acto de colación de la Universidad, pudimos charlar con él y darle un abrazo con todo el orgullo que sentimos por pertenecer a una universidad que incluye y brinda oportunidades a todo el mundo.
Ciclo #DatosUNSAM
Ideado por la Secretaría de Planificación y Evaluación, el ciclo #DatosUNSAM se propone alentar a toda la comunidad académica a mirar y analizar sus procesos y experiencias socioeducativas a partir de información que la institución produce en su gestión cotidiana.
Si sos docente, investigador/a, estudiante avanzado/a o no docente de la Universidad, te invitamos a aportar tu análisis/lectura a partir de información estadística procesada y provista por la Secretaría. Los datos que se presentan en esta nota provienen de los registros administrativos del SIU Guaraní que gestionan los departamentos de servicios académicos de las distintas unidades académicas.
Contacto: secretariapye@unsam.edu.ar