Durante el mes de febrero, un equipo integrado por investigadores de la división de Arqueología del Museo de La Plata (Facultad de Ciencias Naturales y Museo, Universidad Nacional de La Plata), el CONICET, el Instituto de Diversidad y Evolución Austral del Centro Nacional Patagónico (IDEAUS-CENPAT) y el TAREA-IIPC (UNSAM) llevó adelante tareas de relevamiento, prospección y muestreo de pinturas rupestres en la localidad de La María, un conjunto de casi cien sitios arqueológicos —a cielo abierto y en interiores de cuevas y aleros— ubicado a 150 kilómetros de Puerto San Julián, en Santa Cruz.

La localidad es rica en pinturas rupestres, instrumentos líticos y materiales óseos, restos que se consideran evidencias de los primeros pobladores de la Patagonia y de los posteriores desarrollos culturales que tuvieron lugar en la región hasta la llegada de los europeos.

El investigador del TAREA-IIPC Fernando Marte, químico especialista en estudios materiales sobre bienes culturales, hoy lleva adelante junto con su equipo el estudio de los motivos y superposiciones de los conjuntos así como el análisis de algunas de las técnicas de producción.

“En las proximidades de los sitios arqueológicos de La María hay fuentes de materia prima útiles para la producción de arte rupestre: pigmentos minerales y yeso cristalino”, explicó Marte. “En ese contexto, nuestro objetivo es hacer una contribución inicial a la caracterización composicional de las pinturas rupestres de la localidad”, agregó el especialista.

Estas labores se encuentran enmarcadas en la línea de investigación que el TAREA-IIPC desarrolla desde 2012 en arte rupestre y que fue reconocida ‘de Interés’ por la Cámara Nacional de Diputados de la Nación.