Los suplementos de Cultura y Espectáculos de ambos diarios anunciaron la apertura del 19º edición del Festival Guitarras del Mundo, monumental encuentro a cargo del director de la Diplomatura en Música Argentina de la UNSAM.
“Mucho más que un festival”, asegura Carlos Moscardini. “Verdaderamente único en el mundo”, redobla Leandro Angeli, del Cuarteto La Púa. “Un encuentro gigantesco a nivel universal”, determina Martín Páez de la Torre. Y así podría seguirse ad infinitum entre los 200 guitarristas de varias regiones del globo que participarán de esta nueva edición –la decimonovena– del festival Guitarras del Mundo, que se llevará a cabo entre hoy y el sábado 26 de octubre, en unas 90 sedes esparcidas por 17 provincias argentinas. La sensación es que nadie exagera. Que no titulan en positivo por una pretensión de masividad, venta de discos o brillo personal. Todos ellos veneran el evento que dirige Juan Falú, bajo la organización de la UPCN (Unión del Personal Civil de la Nación) y la Secretaría de Cultura de la Nación. Y lo veneran no solo porque les permite mostrar a cada quien lo suyo, sino también por saberse parte de un todo que ningunea a la soledad. “Es un hecho cultural trascendente que establece vínculos profundos, que van más allá de las performances artísticas individuales. Es un encuentro de culturas, de músicas, de historias, de trabajos, de búsquedas donde nada termina en el escenario. Y creo que este es un noble destino para la guitarra”, desarrolla Moscardini, guitarrista, compositor y docente, cuya presentación será pasado mañana a las 20.30 en Uocra Cultura (Rawson 42), junto a los dúos Piscitelli-Gómez Saavedra y Bosphorus*.”
“…en mi experiencia docente en el campo académico, enseñando música popular en el Manuel de Falla o en la Unsam (allí tiene a su cargo las cátedras de tango y folklore, y la recientemente creada Diplomatura en Música Argentina) siempre hago hincapié en que hay que asumir las bondades de la academia, sobre todo en lo que se refiere al estudio de la técnica del instrumento. Y creo que lo ideal para un músico es tener las buenas informaciones de los dos campos. Insisto: hay elementos para pensar que los prejuicios de antes están más debilitados, pero aun así extraño un poquito la presencia de ese mundo académico en un espacio como Guitarras del Mundo.”
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