Si bien los primeros registros de estudios de cristales se remontan a miles de años, la Cristalografía moderna tiene poco más de un siglo. En abril de 1912, el físico alemán Max von Laue realizó, con la asistencia de Walter Friedrich y Paul Knipping, los primeros experimentos de difracción de rayos X al exponer cristales de sulfato de cobre a dicha radiación. Al observar un patrón de difracción, demostraron simultáneamente que (i) los rayos X son ondas electromagnéticas de longitud de onda muy pequeña en comparación con la luz visible y (ii) los cristales están formados por átomos distribuidos en arreglos ordenados, periódicos en el espacio, con distancias características del mismo orden. Poco después, William Henry Bragg y William Lawrence Bragg (padre e hijo, respectivamente) demostraron que con estos experimentos era posible resolver las estructuras cristalinas de compuestos inorgánicos simples. Por estos descubrimientos tan importantes, Max von Laue recibió el Premio Nobel de Física en 1914 y los Bragg en 1915. A partir de allí, la Cristalografía avanzó rápidamente, dando lugar a descubrimientos impactantes en diversas áreas.
En este minicurso se repasarán algunos hitos fundamentales de la Cristalografía a lo largo de los últimos 100 años, y se mostrarán las amplias posibilidades de la difracción de rayos X, que cubre un gran abanico de aplicaciones, desde el estudio de materiales relativamente simples pero de propiedades muy importantes para la Ciencia de Materiales hasta la comprensión de la estructura de macromoléculas complejas, incluyendo las proteínas. Además, se presentarán algunos de los fundamentos físicos y matemáticos de la Cristalografía, como así también la evolución de los instrumentos utilizados.
La conferencia es gratuita y no requiere inscripción previa.
Lugar: Edificio 3iA
Consultas: comunicacion3ia@unsam.edu.ar