La ECyT lanzó iniciativas para mejorar las prestaciones prácticas de los laboratorios de enseñanza que utilizan las carreras. Tanto la incorporación de un carro de computadoras portátiles, como la ampliación de prestaciones del Laboratorio de Electrónica I, significan mejoras de gran valor para las tareas educativas. Hablamos con los no docentes Claudio Alonso, técnico del laboratorio de Informática, y Martín Masciotra, técnico del laboratorio de electrónica, quienes son los que utilizan día a día las instalaciones. 

Un carro de Computadoras Portátiles

A principios del mes de mayo se puso a disposición del plantel docente un carro con 30 computadoras portátiles con sus respectivos cargadores para que puedan ser utilizadas en las aulas comunes, de modo de transformarlas en laboratorios de informática transitorios. El trabajo involucró el diseño y prueba de un protocolo operativo en el que participó el personal técnico de informática y el personal de mantenimiento y de servicios generales de la Escuela. 

“Esta iniciativa fue muy bienvenida por parte de los estudiantes y de los docentes. Hay muchxs estudiantxs que traen sus propias notebooks, pero no todos tienen esa posibilidad.. En el futuro, vamos a poder brindar no solamente el uso del software que está instalado en las computadoras, sino que también le vamos a poder dar conectividad a Wi-Fi” agrega Claudio Alonso. 

Ampliación de prestaciones del Laboratorio de Electrónica I

A su vez, se inauguró el nuevo Laboratorio de Electrónica I (LE-I). Mediante el rediseño de la distribución de las mesas, la colocación de zapatillas eléctricas sobre ellas, la instalación del cañón en el techo y la compra de computadoras portátiles, se revalorizó el espacio físico para tener un laboratorio que permite alojar cómodamente sentados hasta 36 estudiantes, con circulación plena facilitada en tres corredores, y superficie libre sobre mesa maximizada para colocar dos o tres estaciones de trabajo por mesa, sin que exista interferencia con los cables de alimentación general.

“Las ventajas son enormes. Por un lado, los estudiantes pueden venir a estudiar acá, completar alguna práctica o avanzar con algún proyecto. Es decir, un abanico de posibilidades que ahora tenemos para ofrecer a los estudiantes, que antes no era posible” comenta Martín Masciotra. 

Asimismo, se amplió la prestación horaria del laboratorio y se estableció su exclusividad para prácticas de temas electrónicos, por lo que los estudiantes podrán hacer uso de él en horarios de la tarde bajo la supervisión de su técnico encargado para realizar sus proyectos.

Actualmente, el nuevo LE-I se encuentra en pleno funcionamiento. Ambas iniciativas potencian y mejoran las condiciones para que los estudiantes y el plantel docente puedan llevar a cabo el proceso de enseñanza-aprendizaje en excelentes condiciones. 

Escuela de Ciencia y Tecnología, laboratorios