En 2022 la Escuela de Política y Gobierno de la UNSAM lanza el nuevo Doctorado en Administración y Políticas Públicas. un programa que, como señala su director Carlos H. Acuña, “viene a completar la oferta de grado, maestría y doctorado en los tres ámbitos de formación e investigación que la Escuela ha ido desarrollando: la ciencia política, las relaciones internacionales y el análisis de políticas públicas”. A continuación, le preguntamos a Acuña por los aspectos más salientes del Doctorado.

¿Cómo se gestó la idea del Doctorado, o qué nos podés contar sobre su proceso de “creación”?

Creo que no hay forma de entender la génesis de este Doctorado sin reconocerla como parte de un proceso de construcción institucional de la Escuela de Política y Gobierno de la UNSAM desde 1999. La Escuela tuvo la capacidad de articular visiones contemporáneas y críticas de la ciencia política, la economía política, el derecho, la sociología política, la teoría de las organizaciones y las ciencias de la administración y el análisis empírico de las políticas públicas. Y esto tanto con foco en Argentina como con proyección regional hacia América Latina; y con un equipo docente de investigadores-docentes con el grado máximo en sus respectivas especialidades. Este Programa viene a completar la oferta de grado, maestría y doctorado en los tres ámbitos de formación e investigación que la Escuela ha ido desarrollando: la ciencia política, las relaciones internacionales y el análisis de políticas públicas. Esta es una estructura que permite una excepcional articulación entre el Doctorado y su entorno, con un gran potencial por los entrecruzamientos temáticos y de teorías y metodologías de larga presencia y trayectoria, tanto en la Escuela como en la UNSAM en general.

¿Cuál es la originalidad de este programa en Argentina y en la región? Después de tantos años dictando carreras de grado, especializaciones y maestrías en administración y políticas públicas, ¿cuál es el aprendizaje y puntapié para el doctorado?

Tanto la investigación y entendimiento, como la formación en temáticas relacionadas al accionar estatal, se han visto cruzados por una serie de legítimos (y yo agregaría, acalorados) debates: ¿Este conocimiento debe ser general o, dada la especificidad de los distintos ámbitos de la gestión y las políticas públicas, necesariamente con foco sectorial? ¿La aproximación metodológica debe mostrar un perfil más cuantitativo o cualitativo, debe ser necesariamente comparativa o en base a estudios de caso? ¿El acento debe colocarse en la política de las políticas públicas o en los problemas organizacionales y de gestión? ¿Qué alternativas de organización curricular resultan más funcionales para tentar académicos y “paracadémicos” (profesionales interesados por lo académico)?

Con Luciano Andrenacci trabajamos en tres pasos: primero, sistematizamos y debatimos nuestros propios presupuestos (poniendo en jaque viejas certidumbres); segundo, y con el objetivo de capitalizar la experiencia internacional “de punta”, llevamos adelante una selección, relevamiento y análisis de 23 doctorados que se destacan en diversas áreas geográficas; y, tercero, discutimos las alternativas elaboradas con los expertos y expertas de la Escuela de Política y Gobierno de la UNSAM e internacionales cercanos al Doctorado (como Guy Peters, Michael Barzelay o Adam Przeworski).

El resultado creo que muestra una particular potencia y que se ajusta a las características propias de nuestra sociedad y la región. Este es un Doctorado cuyo dictado semi-estructurado y articulación entre materias obligatorias y optativas, permite aproximaciones teóricas generales o sectoriales y metodológicas cuantitativas o cualitativas, como comparativas o con foco en un caso. Por otra parte, con respecto al debate entre las tradiciones más politológicas y aquellas con una perspectiva más organizacional o de gestión, fue diseñado para diferenciarse de los patrones que tienden a inscribirse de manera excluyente en una u otra de estas tradiciones, un fenómeno generalizado entre los doctorados con foco en el accionar público. Finalmente, me parece importante acentuar que su dictado está diseñado con un criterio organizativo que trata de trascender a la Región Metropolitana de Buenos Aires, facilitando la incorporación de estudiantes de otras provincias y de países limítrofes. Sabemos, por la experiencia en los otros doctorados de la EPyG, que esta dinámica de dictado asegura un valiosísimo pluralismo en los intercambios y debates dentro de cada cohorte.

¿Cómo se conforma el equipo docente en sus trayectorias y miradas?

Esta oferta de formación, como te comenté antes, está entrelazada con equipos docentes que investigan en múltiples campos de interés disciplinar, en numerosos grupos, centros y programas específicos, cuyos integrantes incluyen veintidós investigadoras/es del CONICET con sede de trabajo en la Escuela de Política y Gobierno. La mayor parte de los programas y proyectos de investigación presentes en la Escuela tiene fuerte vinculación con los procesos de políticas públicas. Nuestras/os docentes son especialistas en diversas temáticas (como salud, transporte, política subnacional, problemas de gestión como coordinación o evaluación de políticas, entre otras.); sus análisis incluyen una pluralidad de aproximaciones (algunos/as más cuantitativas y otros/as más cualitativas, más comparativa o con un mayor foco en estudios de caso, entre otras.); y exhiben experiencia profesional en el asesoramiento o puesta en práctica de gestión o políticas públicas, ya sea en diversos organismos y niveles del Estado, como en organismos multilaterales.

Aparte de este cuerpo estable de docentes, apuntamos a contar con la visita de reconocidos y reconocidas especialistas de otras universidades y países. De hecho, en este momento estamos cerrando la organización para noviembre de un seminario internacional de lanzamiento del Doctorado, en el que reconocidos expertos internacionales van a debatir las grandes novedades de los desafíos a la gestión y políticas públicas que estamos enfrentando.

¿A quiénes está dirigido? Y, para cerrar, contanos, ¿qué impacto se persigue?

Mirá, formalmente el doctorado está destinado a graduadas/os universitaria/os de carreras universitarias de cuatro años o más de duración, con preferencia formados en disciplinas o subdisciplinas de las Ciencias Sociales, en general; y de la Ciencia Política, en particular. Se apunta a la conformación de cohortes anuales de aproximadamente diez integrantes. Pero de manera más sustantiva, la propuesta aspira a atraer a dos tipos de estudiantes, que suelen tener pocas opciones disponibles en las ofertas existentes: por una parte, estudiantes interesados en aislar, describir y explicar los procesos organizacionales y políticos que se producen en las organizaciones estatales; y, por la otra, profesionales vinculados al diseño, implementación y evaluación de políticas públicas que aspiren a utilizar herramientas académicas para desarrollar conocimiento y soluciones en el campo de su práctica.

Dada la naturaleza del campo elegido, una ciencia “aplicable”, el Doctorado apunta a contribuir con la producción científica de estudios y tecnologías capaces de tener impacto en la dinámica de las organizaciones públicas y su accionar en todos los niveles del Estado.

Te cuento algo personal. Por años me han consultado dónde hacer un doctorado sobre políticas y gestión pública. Hoy no dudaría en recomendar el de la UNSAM.

Inscripción: Octubre de 2022.

Contacto: doctoradopp@unsam.edu.ar

Más información, acá.

administración pública, Carlos Acuña, doctorado en Administración y Políticas Públicas, políticas públicas, Posgrados EPyG