El premio Ingeniero Isidoro Marín fue instaurado por la Academia Nacional de Ingeniería en 1993 y distingue a los/las egresados/as sobresalientes de las carreras de Ingeniería que se dictan en universidades del país —nacionales, provinciales o privadas—. Se otorga cada año a quienes se hayan destacado por su capacidad y dedicación al estudio durante su carrera universitaria alcanzando un nivel sobresaliente de capacitación científico-técnica reconocido por su universidad y por la academia.

Los candidatos considerados para la adjudicación de estos premios deben ser ingenieros egresados con un promedio de calificaciones igual o superior a ocho puntos habiendo cumplimentado la cursada en el número de años establecido como normal para la carrera —la cual deberá tener, como mínimo, 5 años de duración—.

Este año, uno de los reconocimientos fue para Matías Federico Escribá García, egresado de la Ingeniería en Materiales del Instituto Sabato (ITS). En años anteriores resultaron premiados por la UNSAM los ingenieros Mauricio Exequiel Cazado, Agustín José Marcuzzi, Pablo Miguel Piaggi y Pablo Ezequiel Schönhals.