La directora del Centro Universitario San Martín realizó una comparación entre lo que se ve en la serie El Marginal y la realidad en un penal de la provincia de Buenos Aires.
“Las ficciones carcelarias podrían incorporar relaciones relativas a la trama. En las cárceles hay relaciones de sexo, paternalismo y dominación. Pero también relaciones afectivas y al contrario de lo que se piensa afuera, el cuidado de unos a otros es una noción central”, argumentó la antropóloga.
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