“Hay países que están especializados en productos industriales y con muy altos niveles de innovación, investigación y desarrollo. Es el caso de Estados Unidos, Corea, Japón, Alemania […]. El sistema tecnológico está muy imbricado con el aparato productivo. No todos los países desarrollados se acoplan a ese patrón: tenés Australia, Nueva Zelanda, Noruega, que están especializados en recursos naturales que tienen un enorme peso en la estructura productiva, pero que a diferencia de otros países tienen altos niveles de investigación y desarrollo […]. Luego tenés el caso típico de los países subdesarrollados, que exportan materias primas y sus derivados y tienen bajos niveles de investigación y desarrollo, baja capacidad de marca, etc. Ahí tenés a Argentina, casi toda la región latinoamericana, casi todo África y parte de Asia”, fundamentó el especialista.

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