Al igual que en cualquier campo del conocimiento, en transporte existen preconceptos que suelen instaurarse como verdades indiscutibles. Estas nociones, también denominadas “mitos” o “verdades a medias”, pocas veces resisten la corroboración de los análisis científicos —en el mejor de los casos, los estudios ponen de manifiesto el carácter de verdad parcial o simplificada de problemas que son más complejos—.

En esta breve entrevista, el docente e investigador del IT Marcelo E. Lascano desarma, a partir del caso de los corredores biocéanicos, uno de los mitos más reproducidos en materia de transporte: el concepto de “corredor de transporte”.

¿Que son los “corredores de transporte”? 

Muchas veces se habla de “corredores de transporte” en referencia a una carretera larga o a un flujo de tránsito de carga. El concepto de corredor de transporte es una herramienta de planeamiento. Los corredores no son una entidad en sí, sino que son una forma de conceptualizar el rol estructurador que las inversiones en infraestructura de transporte podrían tener, potencialmente, sobre el territorio.

¿Cuándo hablamos de “mito” y cuándo de “verdad a medias”?

A menudo se exagera la incidencia de las inversiones en transporte sobre la organización de las actividades productivas o del sistema de asentamientos. Otras veces, al hablar de “corredores bioceánicos”, se afirma que “este” o “aquel corredor” alimentarán al puerto, y crean una imagen metafórica en la que la infraestructura funciona bajo las leyes de la mecánica de fluidos olvidando la gravitación de otros factores, como los circuitos del comercio exterior, los hábitos de los cargadores o la disponibilidad de servicios marítimos.

¿Por qué es importante la discusión sobre el tema?

Precisar el alcance del concepto de corredor es importante porque, al tratarse de un concepto sencillo, suele ser la base sobre la que se diagnostican los problemas de transporte y se produce, luego, un diseño de las inversiones con formatos que pretenden resolver un problema de “mecánica de fluidos” sin abordar sustantivamente las falencias que enfrentan los cargadores para acceder a servicios más diversificados y de menor costo.