Infinita tristeza. Palabras de Laura Malosetti Costa

Lo había leído y lo admiraba mucho. Tuve el inmenso privilegio de conocer a José  Nun personalmente cuando, gracias a mi querido maestro José Burucúa, fui invitada a ser profesora en el Instituto de Altos Estudios Sociales a comienzos de este siglo. Pepe había creado el IDAES y lo trajo a la UNSAM, salvándolo del naufragio de la Fundación Banco Patricios.