La UNSAM vuelve a decir presente en dos experiencias culturales y tecnológicas que combinan historia, memoria y vanguardia audiovisual: Pisar Malvinas y la serie El Eternauta, recientemente estrenada por Netflix. Detrás de ambas producciones, el talento y la formación de nuestros estudiantes volvió a marcar la diferencia.
Desarrollado por estudiantes y docentes de la Tecnicatura en Animación 3D y Efectos Visuales de la Escuela de Arte y Patrimonio (EAyP), Pisar Malvinas es una muestra de realidad virtual que permite recorrer simbólicamente las Islas Malvinas. Mediante tecnología 3D, modelado digital y técnicas de fotogrametría, la experiencia reconstruye con precisión geográfica, ambiental y emocional distintos paisajes del archipiélago, como el Monte Longdon o la fauna autóctona.
El proyecto fue ideado, creado y desarrollado por Federico Ledesma como trabajo final de la carrera y contó con el acompañamiento del Museo Malvinas e Islas del Atlántico Sur. Con la participación de un equipo interdisciplinario de docentes y estudiantes, la experiencia ya recorrió numerosas ciudades argentinas y fue distinguida por la Legislatura Porteña como de interés social, cultural y educativo.
Incluso el papa Francisco vivió la experiencia desde el Vaticano en diciembre de 2022, en un gesto simbólico que fortaleció el mensaje de memoria y soberanía del proyecto.
Pisar Malvinas, pensado como un contenido educativo, es un proyecto que sigue en expansión y, gracias a la UNSAM, tomó su vuelo propio articulando con una amplia red de organizaciones del ámbito público y privado.
En Pisar Malvinas Federico investigó e incorporó técnicas como fotogrametría y Digital Twins aplicados al software Unreal Engine. Esto abrió puertas a su participación en El Eternauta, la superproducción de Netflix basada en la historieta de Héctor Germán Oesterheld. Allí, Federico formó parte del equipo de efectos visuales, colaborando en la creación de escenarios clave de la serie, incluyendo una intensa secuencia ambientada en el Monte Longdon.
Ambos proyectos muestran el impacto de una universidad pública que apuesta por la tecnología, la producción cultural y la formación profesional de excelencia. Una universidad del conurbano, que produce conocimiento con identidad, y forma profesionales capaces de dialogar con las grandes ligas del entretenimiento global y con los territorios que sostienen la historia nacional.
¿Qué significó para vos, como estudiante de una universidad pública, trabajar sobre un territorio tan cargado de memoria y disputa como Malvinas?
En cuanto a la realización de Pisar Malvinas, tengo la mejor forma de resumirlo: empecé el proyecto en 2020 y logramos hacer una primera parte que ya fue exhibida y distribuida, pero nunca dejé de seguir realizando contenidos para Pisar Malvinas, porque ya es algo que me motiva personalmente y lo pienso como un contenido educativo que sigue en expansión y desarrollo. En ese sentido nos encontramos en plena expansión hacia una continuidad del proyecto.
¿Te imaginaste que la experiencia iba a llegar tan lejos? ¿Qué sentiste cuando supiste que el Papa Francisco la vivió en el Vaticano?
Ver que nuestro aporte muy humilde a la causa Malvinas llegó a sus manos gracias al Museo Malvinas fue emocionante. Me emociona ver todo el recorrido de Francisco con las causas nobles como esta.
¿Cómo se dio tu participación en la serie El Eternauta? ¿Qué rol ocupaste en el equipo de efectos visuales?
Fui convocado por Ignacio Pol, que es el supervisor de Efectos Visuales de la serie junto con Pablo Accame. Tuve a Ignacio como docente en la UNSAM, en la materia Supervisión en Set. En la primera etapa del proyecto estuve como Digital Twins / Photogrammetry Technical Artist y, luego de terminar mi tarea, dentro de la posproducción, me propusieron pasar a trabajar como Unreal Engine y VFX artist. Todo eso se dió dentro del Virtual Art Department, trabajando con Virtual Production.
¿En qué momento te diste cuenta de que el trabajo en Pisar Malvinas te había dado herramientas para El Eternauta?
Con Pisar Malvinas me interioricé mucho en lo que es fotogrametría porque quería incluir objetos reales de la Guerra de Malvinas con esta técnica. Entonces me puse a escanear objetos de guerra, buscándolos en museos o centros de excombatientes. Para mí fue como una antesala a lo que hice en la serie con los gemelos digitales de El Eternauta. Luego hay una experiencia muy concreta: en 2023 estuve dando clases en un curso de Matchmove de la carrera, junto con Camila Duarte. En ese momento pude ordenar un flujo de trabajo que incluía fotogrametría porque me parecía importante que los alumnos pudieran ver la integración de un gemelo digital a un plano de VFX, con la escala y posición correcta para llevarlo al motor de render. También pude aplicar esto en El Eternauta.
¿Qué desafíos técnicos encontraste al momento de recrear un paisaje tan específico como el Monte Longdon?
Fue un trabajo colectivo en donde intervinieron muchas partes. Yo tenía una librería de assets porque vengo desarrollando contenidos sobre Malvinas desde hace ya 5 años, entonces puse eso a disposición del grupo. Monte Longdon tiene características geológicas muy específicas como los ríos de piedras, la turba o la falta de árboles, entonces todo tenía que ser creado desde cero. Empezamos a basarnos en mapas de altura y a hacer pruebas para tener un terreno que nos de las elevaciones y la escala, luego eso sirvió como referencia para llevarlo a Unreal, donde Lucio Anselmi aplicó la generación de contenidos procedurales junto al desarrollo general del equipo de Unreal Engine y la supervisión de VFX, que a su vez trabaja con Dirección de Arte y Fotografía. Todo este trabajo luego pasa a la composición digital, que es la imagen final que vemos en la serie.
¿Cuál fue la escena o secuencia que más disfrutaste construir?
Te diría que lo que más disfruté fue también el mayor desafío, que tuvo que ver con el escaneo de la Ciudad de Buenos Aires y Zona Norte de la provincia. Me motivaba saber que no había antecedentes de la escala de lo que estábamos haciendo. Lo disfrutamos porque además era un elemento fundamental para todo lo que seguía en la cadena de producción. La fotogrametría es una gran base que ayuda mucho a todo el proceso de la creación de los efectos visuales que prosigue, entonces fue muy gratificante saber que estábamos generando un aporte significativo para la serie.
¿Creés que las nuevas tecnologías pueden ser una forma de construir memoria y soberanía?
Sin dudas, no se puede pensar la educación del presente y futuro sin la incorporación de nuevas tecnologías. La fotogrametría incluso tiene un uso muy específico en lo que es conservación digital del patrimonio. En Pisar Malvinas seguimos haciendo gemelos digitales de objetos de guerra o restos arqueológicos, que con el paso del tiempo se van deteriorando. Desde ahí entonces hacemos un aporte a la construcción de la memoria. El proyecto sigue en desarrollo ya que lo pienso como un material educativo, por lo tanto requiere actualizaciones y puede ser entendido como un contenido transmedia. La primera parte del proyecto la realizamos gracias a la UNSAM, y por ello pudimos tomar vuelo propio, montar nuestro propio estudio y trabajar con varias organizaciones del sector público y privado. Actualmente estamos desarrollando Pisar Malvinas 2 y el principal objetivo es contribuir a la construcción de la soberanía para nuestro país.