Escuela de Bio y Nanotecnología (EByN), Instituto de Nanosistemas
Priscila Vensaus realizó su tesis doctoral sobre la aplicación de nanotecnología en el desarrollo de nuevos materiales para la generación de energías renovables. La dirección del trabajo estuvo a cargo del Dr. Galo Soler Illia y la codirección de la Dra. Magalí Lingenfelder.
Por Virginia Zubieta
“Recibir este reconocimiento es una alegría inmensa y un verdadero honor. Agradezco al jurado y a la asociación por valorar mi trabajo. Aunque el premio lleva mi nombre, sé muy bien que la ciencia no se hace en soledad. Haber llegado hasta acá fue posible gracias a mis directores, Galo y Maggie, que confiaron en mí; mis compañeros del INS, con quienes compartimos mates, alegrías, frustraciones y aprendizajes; mis amigos, mi familia y mi esposo, que siempre estuvieron ahí bancándome”, celebró Priscila Vensaus al recibir el premio Prof. Hans Schumacher a la mejor tesis doctoral en Fisicoquímica 2023-2024 de Argentina con su trabajo Materiales nanoestructurados para la reacción de evolución de oxígeno: usando luz y spin para mejorar la catálisis. El acto se realizó en el marco del XXIV Congreso Argentino de Fisicoquímica y Química Orgánica (CAFQI), donde la flamante ganadora recibió el Diploma de Honor de la Asociación Argentina de Investigaciones Fisicoquímicas (AAIFQ).
Vensaus hizo su doctorado en el grupo de Nanoarquitecturas del Instituto de Nanosistemas (EByN-UNSAM), bajo la dirección del Dr. Galo Soler Illia, y la codirección de la Dra. Magalí Lingenfelder, directora del Max Planck-EPFL Laboratory for Molecular Nanoscience, de Suiza. Se doctoró en 2024 con mención Summa Cum Laude, la máxima distinción académica, y de su investigación surgieron publicaciones en revistas de alto impacto científico como Nature Communications y ACS Applied Engineering Materials.
A lo largo de su joven carrera académica recibió distinciones varias como la beca Estímulo UBACyT y la beca del Centro de Baviera para América Latina (BAYLAT) con la que hizo una estancia de investigación en la Friederich Alexander Universität Erlangen-Nürnberg, Alemania. Fue medalla de bronce en las 45º Olimpíadas Internacionales de Química 2013, en Moscú; y durante su doctorado ganó en más de una ocasión el premio al mejor póster científico en congresos nacionales e internacionales. Obtuvo la beca doctoral CONICET y también la Swiss Government Excellence Scholarship con la que pudo trabajar parte de su tesis en el laboratorio de la Dra. Lingenfelder.
“Es un gran orgullo que Priscila haya ganado este premio. Es una gran futura investigadora; una persona que piensa, trabaja, crea, resuelve problemas, no se desanima jamás y siempre trata de entender. Ha sido honesta con sus resultados y crítica. Poder tener una tesista así, que va a ser una gran embajadora de la ciencia argentina en el mundo, es fabuloso. Ella realmente entendió lo que es la ciencia: tratar de comprender la naturaleza y de explicarla” señaló Soler Illia. Para el investigador Superior de CONICET y director del INS, este premio también es un reconocimiento de la AAIFQ al trabajo de alto nivel que se está realizando en la Universidad y especialmente en el INS.
La Dra. Magalí Lingenfelder, desde Suiza, agrega “Priscila llegó a nuestro laboratorio de física como experta en química de materiales gracias a una beca de excelencia, pero rápidamente amplió su campo y se interesó en temas clave de química física y energía. Su talento la llevó a integrarse plenamente en nuestro equipo, participando en distintos proyectos internacionales a la vez que desarrollaba su tesis doctoral. Me llena de orgullo recibir estudiantes como Priscila, que brillan ante cada oportunidad y ponen en alto a la educación argentina. Sus logros recién comienzan: es una científica con un potencial extraordinario”
En este sentido, la científica ganadora enfatizó el valor de la ciencia y la educación del país. “En un contexto donde muchas veces se cuestiona su importancia, hay que decirlo: la ciencia que hacemos en Argentina está a la altura de los mejores centros del mundo. La gran diferencia, lamentablemente, está en los recursos y el financiamiento”. Asegura que la educación pública de calidad fue clave para su recorrido académico: “Todo lo que pude hacer fue posible gracias a la formación que recibí en la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA y en UNSAM, donde aprendí muchísimo y me formé con docentes y científicos de primer nivel. Espero que sigamos defendiendo y apostando por la ciencia argentina, y que pronto se reconozca el trabajo de todos los que, desde distintos ámbitos, hacemos avanzar el conocimiento en el país”.