Escuela de Economía y Negocios
El más reciente estudio del economista e investigador Lucas Ronconi (CONICET- EEyN- UNSAM) se publicó en la revista Journal of Development Economics, con una propuesta provocadora para los debates sobre política fiscal y democracia: ¿qué tipo de Estado estamos construyendo cuando elegimos que las personas cumplan con sus obligaciones a través del miedo, y no desde la convicción?
Tras mucho trabajo, el estudio del economista e investigador Lucas Ronconi finalmente ve la luz en la prestigiosa revista Journal of Development Economics, debatiendo sobre política fiscal y democracia en un artículo llamado “Compliance and accountability-seeking: Evidence from a field experiment in Argentina” realizado en conjunto a Krzysztof Krakowski (King’s College London, United Kingdom).
“Lo primero que debe hacer un país que intenta aumentar la recaudación, es mejorar la calidad de los servicios públicos que brinda, como educación, salud y seguridad. Adicionalmente, se pueden aumentar las inspecciones y las multas, por un lado; y persuadir apelando a normas sociales, por el otro, a la idea de que pagar impuestos es lo correcto”, explica Ronconi. Su estudio, realizado en 60 estaciones de tren del Gran Buenos Aires, pone a prueba ambas estrategias en un contexto cotidiano: pagar —o no— el boleto del tren.
El diseño experimental fue tan ingenioso como simple: asistentes de investigación se colocaron en la entrada de las estaciones con remeras que llevaban distintos mensajes. Uno apelaba al castigo (“Evite multas”), otro a la norma social (“El 90% de los argentinos paga el boleto”), y un tercero —el grupo de control— no tenía ningún mensaje. ¿El resultado? Con miedo a la multa, pagó un poco más del 40%; con la apelación social, 37%; sin mensaje, solo el 31%.
Hasta ahí, nada que contradiga la literatura existente: el castigo es lo que mejor funciona para recaudar. Pero la verdadera novedad vino después. Mientras esperaban el tren, los pasajeros eran abordados por otro asistente que les proponía firmar una petición por mejor calidad en el transporte público, una acción cívica concreta. Fue entonces cuando apareció el hallazgo clave: quienes habían pagado motivados por la norma social mostraron una mayor disposición a firmar la petición. En cambio, quienes lo hicieron por miedo a la multa, no mostraron diferencias significativas con el grupo de control.
“El cumplimiento forzado sirve para recaudar, pero tiene menores retornos en participación cívica”, advierte Ronconi. Y ese matiz tiene implicancias para la política pública. En un contexto donde se exige más eficiencia estatal, sugiere que construir una ciudadanía activa requiere algo más que mano dura: requiere confianza, reciprocidad y una cultura del cumplimiento basada en normas compartidas.
Pero el estudio no se queda solo en los datos. Propone una hipótesis inquietante: que en la historia Argentina, algunos actores políticos han desincentivado deliberadamente el cumplimiento normativo —dejando pasar la evasión, el uso informal de servicios o la falta de control— como estrategia para desactivar la participación cívica. “El ciudadano que no cumple es, usualmente, un ciudadano silenciado”, concluye Ronconi.
La publicación llega en un momento crucial, donde el debate sobre el tamaño del Estado, la evasión fiscal y la participación ciudadana está más vigente que nunca. Y pone sobre la mesa una pregunta incómoda: ¿queremos más recaudación a cualquier costo, o una sociedad en la que los ciudadanos no solo paguen, sino también exijan, participen y controlen?
Con este estudio, Lucas Ronconi no solo ofrece evidencia rigurosa, sino que invita a pensar el rol del Estado, la ciudadanía y la democracia en los márgenes del andén.
Sobre Lucas Ronconi
Es especialista en economía laboral. Sus principales temas de investigación son la regulación laboral efectiva, y las normas sociales y el comportamiento cívico en América Latina.
Es investigador independiente del CONICET con sede en la EEyN. Participa de equipos internacionales de investigación como el Instituto Laboral IZA en Alemania, y el Grupo de Pobreza y Política Económica PEP en Canadá.
Publicó numerosos artículos en revistas científicas, incluyendo Desarrollo Económico y World Development. Fue investigador del Labor Center en la Universidad de California, e investigador invitado del Collegio Carlo Alberto, Italia. Co-fundó la Escuela de Liderazgo Político del CIAS. Fue becario Fulbright, y recibió premios de GDN, INAP, y la Sociedad Argentina de Análisis Político.
Es doctor en Políticas Públicas por la Universidad de California, Berkeley; magister en Desarrollo Económico por la Universidad de Yale; y licenciado en Economía por la Universidad de San Andrés (con honores).
Investigación EEyN, Secretaria de Investigación EEyN